miércoles, 10 de diciembre de 2014







El sábado seis de diciembre participamos de la alegría de la fiesta de San Nicolás en la casa de acogida para niños de la ciudad de Nezhyn. Agradecemos a todos los que la hicieron posible.

La fiesta comenzó con una representación. El grupo que preparó el teatro pertenece auna parroquia greco-católica del Podol. Se componía de una mamá con su hija, un padre con su hijo y tres adultos más, que con otras personas tienen iniciativas lúdicas con chicos en situaciones difíciles. La obra era interesante: trataba de la historia de un niño que no siente ninguna necesidad de soñar porque tiene lo que más le gusta: un ordenador con todos sus juegos favoritos. No obstante, aunque San Nicolás se siente rechazado por el niño está dispuesto a otorgarle el regalo que más desee. El niño pidió un juego de ordenador que nadie en el mundo tuviera y San Nicolás le regaló un juego en el que el niño mismo es el protagonista. La historia está llena de aventuras hasta que el niño va reconociendo que el mejor regalo es ser precisamente uno mismo un regalo para los demás. Los niños disfrutaron con la historia y se sentían muy identificados con este niño, con sus respuestas y reacciones. También les impresionó ver actúar juntos a niños y adultos, porque al venir de familias rotas, no tienen en muchos casos la experiencia de que los mayores hayan participado de sus diversiones o de haber hacho algo constructivo con ellos.

Los que repartían los regalos: san Nicolás y su ayudante eran muy cariñosos con los niños. Les iban enseñando los paquetes pero de forma muy simpática les animaban a ofrecer algo de sí al resto antes de recibir el regalo. Ellos no sabían que iba a haber una fiesta, porque queríamos que fuese sorpresa. Y sin estar preparados casi todos dijeron con mucha espontaneidad poesías, adivinanzas,... hasta los chicos más mayores se atrevieron a salir delante. Me gustó que no fue nada forzado y que si alguien era más tímido estos buscaban alguna excusa para valorarles y darles también el regalo.

sábado, 22 de noviembre de 2014

Os invitamos a un encuentro de oración y compartir fraterno para preparar el corazón para la Navidad
Fecha: 29 de noviembre, sábado, desde las 14.30 hasta las 19.30
Lugar: Calle Bugorna 11/ 14. 
Hay que traer consigo Biblia, boli y cuaderno, algo para acompañar el té y las preguntas que llevamos en el corazón.
Cómo llegar: Metro Dorogozhichi y trolebuses 22 y 19
Teléfonos de contacto: 097 394 3452
063 680 1810

sábado, 18 de octubre de 2014

 Este domingo tiene lugar en Roma la beatificación del Papa Pablo VI. La beatificación coincide con la clausura del Sínodo de Obispos, un organismo de la Iglesia crado por Pablo VI, que este año se centra en la familia.

Giovanni Battista Montini nació en 1897. Ingresó a los 19 años al Seminario de Brescia y fue ordenado sacerdote a los 23 años. En 1922 ingresó al servicio papal como miembro de la Secretaría de Estado. Dedicó gran parte de sus esfuerzos apostólicos al movimiento italiano de estudiantes católicos.

Como asistente del Secretario de Estado, prestó un gran apoyo en la ayuda que la Santa Sede brindó a numerosos refugiados y presos de guerra. Fue desde 1954 Arzobispo de Milán, una diócesis con un problema social. Los puntos centrales  de su plan pastoral fueron la preocupación por los problemas sociales, el acercamiento de los trabajadores industriales a la Iglesia, y la renovación de la vida litúrgica. En 1958 fue creado Cardenal por S.S. Juan XXIII quien, le otorgó un importante rol en la preparación del Concilio Vaticano II al nombrarlo su asistente. 
A los 66 años fue elegido Papa en 1963, tomando el nombre de Pablo VI. El programa de su pontificado fue: su principal esfuerzo se orientó a la culminación y puesta en marcha del Concilio, convocado e inaugurado por su predecesor. Además, el anuncio universal del Evangelio, el trabajo en favor de la unidad de los cristianos y del diálogo con los no creyentes, la paz y solidaridad en el orden social a escala mundial. En enero de 1964, Pablo VI realizó un viaje sin precedentes a Tierra Santa, en donde se dio el histórico encuentro con Atenágoras I, Patriarca de Jerusalén. Ese mismo año publicó su encíclica programática Ecclesiam suam. En 1965, un día antes de finalizar el gran Concilio, el Papa Pablo VI y el Patriarca Atenágoras I hicieron una declaración conjunta por la que deploraban y se levantaban los mutuos anatemas quer habían provocado el cisma de oriente y occidente.
Vivió el difícil periodo del post-concilio con profunda prudencia, paciencia y valentía, así como su constancia y en el difícil período posconciliar de su pontificado. Como timonel de la Iglesia, barca de Pedro, en los momentos más críticos, mantuvo una esperanza inconmovible. Murió en 1978. En quince años de Pontificado, este Papa mostró a todo el mundo, cómo se ama, cómo se sirve y cómo se trabaja y sufre por la Iglesia de Cristo».   
Lecturas de la misa dominical
Primera lectura: Isaías 45,1.4-6:
Así dice el Señor a su Ungido, a Ciro, a quien lleva de la mano: «Doblegaré ante él las naciones, desceñiré las cinturas de los reyes, abriré ante él las puertas, los batientes no se le cerrarán. Por mi siervo Jacob, por mi escogido Israel, te llamé por tu nombre, te di un título, aunque no me conocías. Yo soy el Señor y no hay otro; fuera de mí, no hay dios. Te pongo la insignia, aunque no me conoces, para que sepan de Oriente a Occidente que no hay otro fuera de mí. Yo soy el Señor, y no hay otro.»


Salmo responsorial: Sal 95
Aclamad la gloria y el poder del Señor

Segunda lectura: 1 Tesalonicenses 1,1-5b:
Pablo, Silvano y Tirnoteo a la Iglesia de los tesalonicenses, en Dios Padre y en el Señor Jesucristo. A vosotros, gracia y paz. Siempre damos gracias a Dios por todos vosotros y os tenemos presentes en nuestras oraciones. Ante Dios, nuestro Padre, recordarnos sin cesar la actividad de vuestra fe, el esfuerzo de vuestro amor y el aguante de vuestra esperanza en Jesucristo, nuestro Señor. Bien sabemos, hermanos amados de Dios, que él os ha elegido y que, cuando se proclamó el Evangelio entre vosotros, no hubo sólo palabras, sino además fuerza del Espíritu Santo y convicción profunda.

Evangelio: Mateo 22,15-21
En aquel tiempo, se retiraron los fariseos y llegaron a un acuerdo para comprometer a Jesús con una pregunta.
Le enviaron unos discípulos, con unos partidarios de Herodes, y le dijeron: «Maestro, sabemos que eres sincero y que enseñas el camino de Dios conforme a la verdad; sin que te importe nadie, porque no miras lo que la gente sea. Dinos, pues, qué opinas: ¿es licito pagar impuesto al César o no?» Comprendiendo su mala voluntad, les dijo Jesús: «Hipócritas, ¿por qué me tentáis? Enseñadme la moneda del impuesto.» Le presentaron un denario. Él les preguntó: «¿De quién son esta cara y esta inscripción?» Le respondieron: «Del César.» Entonces les replicó: «Pues pagadle al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.»

viernes, 23 de mayo de 2014

AVISOS: Este domingo 25 de mayo es el último en que celebramos la misa en español. Las misas se reanudarán el primer domingo de septiembre.

sábado, 10 de mayo de 2014

El domingo 11 de mayo en Ucrania, Ecuador, Perú  y en muchos otros países es el día de la madre. Les agradecemos su cariño y entrega generosa:

Felices las madres que pueden festejar este día con su familia unida.
Felices también aquellas que a pesar de la desunión no dejaron de ser madres.
Felices las madres viudas que volcaron todo su amor en la crianza de sus hijos.
Felices las madres solteras que prefirieron la vida de sus hijos antes que su propia vida.
Felices las madres adoptivas que dieron su corazón a quienes no podían dar su corazón.
Felices las madres que se animaron a recibir ese nuevo hijo que no esperaban porque ya eran demasiados en casa.
Felices las madres que perdieron un hijo porque una parte de su alma ya las espera en el cielo.
Felices las madres que perdonan a sus hijos, sepan que el Señor no las olvida.
Felices las madres que esperan el regreso del hijo descarriado, sus lágrimas son el faro que los traerá de vuelta.
Felices las madres que saben educar en libertad a sus hijos y no quieren retenerlos a su lado para siempre.
Felices las madres que a pesar de la droga, el alcohol o la prostitución nunca dejaron de ser madres
Felices las madres que se arremangan para criar a sus hijos porque con su sudor demuestran la fuerza de su amor.
Felices las madres espirituales y las madres vírgenes que engendraron en la fe a tantos hijos para la Iglesia. Dios las recompensará ciento por uno.
Felices las tías y las hermanas que hicieron de madres aunque no estuvieran obligadas.
Feliz la mujer que no se guarda para sí misma sino que cumple con su vocación con la entrega y el cariño para los demás.
Feliz la mujer que postergó su profesión para ser solamente madre porque así cumple con su vocación más profunda.
Feliz la mujer que eligió su vocación de madre y su profesión para dar a sus hijos lo mejor de ella.
Felices las madres que se durmieron en el Señor porque ellas también nos están preparando un lugar.

sábado, 26 de abril de 2014

Hoy en Roma se canoniza a los Papas Juan XXIII y Juan Pablo II

Juan XXIII (1958-1963); Nació en un pueblito al norte de Italia. Su familia era campesina, profundamente católica, humilde y a la vez muy numerosa: eran trece hermanos.  A los once años, entró al seminario de Bérgamo.
En 1903 culmina sus estudios en Roma con un doctorado en teología. En 1904 es ordenado sacerdote y su primera Misa la ofició en la Basílica de San Pedro.  En 1905 va a Bérgamo para trabajar al lado de su Obispo, Mons. Tedeschi (1857-1914), quien lo nombró su secretario personal. Aprendió mucho de la vida ejemplar de su Obispo, con quien trabajó hasta la muerte de éste. En su época de secretario (1905-1914) enseñaba también en el seminario de Bérgamo.
Con el estallido de la primera guerra mundial, en 1914, se incorpora al ejército, ofreciendo su servicio en la pastoral sanitaria, y después como capellán militar. Cerca del final de la guerra, en 1918, es nombrado director espiritual del Seminario de Bérgamo. Un año después, lo llamaron a Roma para trabajar en la Congregación para la Propagación de la Fe.
En marzo de 1925, Pío XI lo nombra Visitador Apostólico en Bulgaria, una nación mayoritariamente ortodoxa y con un Estado confesional ortodoxo. Después de siete siglos Bulgaria contaría nuevamente con un representante oficial de la Santa Sede en su territorio. El 19 de marzo de 1925, Guiseppe Roncalli era consagrado Obispo. En 1934 es nombrado Delegado Apostólico para Turquía y Grecia. Durante la segunda guerra mundial, con ayuda de la Santa Sede y en contacto estrecho con la Iglesia Ortodoxa, prestó una significativa y caritativa ayuda a la población. Jugó un importante rol para salvar a miles de judíos del exterminio.
El 6 de diciembre de 1944, en un momento muy delicado que exigía de gran tacto y habilidad diplomática, el Papa Pío XII lo nombra Nuncio en París. Con su presencia paternal y bondadosa logró que a los prisioneros de guerra alemanes se les diese un trato digno y respetuoso. Prestó un verdadero servicio reconciliador y en un período en el que entre los franceses muchas heridas habían quedado abiertas.

En 1953, con 71 años, es nombrado por el Papa Pío XII Cardenal y Patriarca de Venecia: Comienza una nueva etapa se abría en su vida: el servicio pastoral directo. En Venecia, libre ya de las innumerables exigencias de su servicio diplomático, pudo darle más tiempo a los encuentros cotidianos con la gente sencilla y humilde: "Se le veía rezando con frecuencia en la catedral, se paraba por las calles para hablar con la gente sencilla, como los gondoleros, visitaba las parroquias, acudía a la cárcel para estar con los prisioneros...”

A los 76 años de edad, el 28 de octubre de 1958 fue elegido Papa. Quiso asumir el nombre del Apóstol Juan, el discípulo amado.  A pesar de su edad, Juan XXIII asumió un gran reto: convocar el Concilio Vaticano II.

Por su humilde deseo de ser un buen "párroco del mundo" supo ver la necesidad de que la Iglesia reflexionara sobre sí misma para poder responder adecuadamente a las necesidades de todos los hombres y mujeres pertenecientes a un mundo en cambio que se alejaba cada vez más de Dios.

Su extraordinaria bondad y simpatía le permitió ganarse la amistad y el respeto de gente muy diversa, lo que con justicia le mereció el calificativo de "Il Papa buono", el Papa bueno.

Juan Pablo II: Karol Józef Wojtyła: Nació en Wadowice (Polonia) el 18 de mayo de 1920. Su madre falleció en 1929 y su padre en 1941. En 1938 se matriculó en la Universidad de Cracovia y en una escuela de teatro. Cuando los nazis cerraron la Universidad, en 1939, Karol tuvo que trabajar en una cantera y luego en una fábrica química, para evitar la deportación a Alemania. A partir de 1942, al sentir la vocación al sacerdocio, siguió las clases de formación del seminario clandestino de Cracovia. Se ordenó sacerdote en Cracovia en 1946. Se doctoró en 1948 en teología en Roma. Durante las vacaciones ejerció el ministerio pastoral entre los emigrantes polacos de Francia, Bélgica y Holanda.
En 1948 volvió a Polonia y fue capellán de los universitarios hasta 1951, cuando reanudó sus estudios filosóficos y teológicos. Fue, desde 1953, profesor de Teología Moral y Etica Social en el seminario mayor de Cracovia y en la facultad de Teología de Lublin. En 1958 fue nombrado  Auxiliar de Cracovia y en 1964 fue nombrado Arzobispo de Cracovia por Pablo VI, quien le hizo cardenal en 1967. Participó en el Concilio Vaticano II (1962-1965)
El 16 de octubre de 1978 fue elegido Papa. Tomó el nombre de Juan Pablo II. Su pontificado ha durado casi 27 años.Juan Pablo II ejerció su ministerio petrino con incansable espíritu misionero. Realizó 104 viajes apostólicos fuera de Italia, y 146 por el interior de este país. Su amor a los jóvenes le impulsó a iniciar en 1985 las Jornadas Mundiales de la Juventud. Promovió el diálogo con los judíos y con los representantes de las demás religiones, convocándolos en varias ocasiones a encuentros de oración por la paz, especialmente en Asís.
Entre sus documentos principales se incluyen: 14 Encíclicas, 15 Exhortaciones apostólicas, 11 Constituciones apostólicas y 45 Cartas apostólicas.  Promulgó el Catecismo de la Iglesia Católica. Reformó el Código de Derecho Canónico y el Código de Cánones de las Iglesias Orientales; y reorganizó la Curia Romana.
Juan Pablo II falleció el 2 de abril de 2005. En la víspera del domingo de la Misericordia Divina.


Actividades:
Hoy, 27 de abril,  la Iglesia canoniza a los Papas Juan XXIII y Juan Pablo II. Invitamos a quienes lo deseen a ver esta tarde la película sobre la vida de Juan Pablo II: Karol, el hombre que se convirtió en Papa
Lugar: Casa de las hermanas dominicas

Direccción: Shcherbakova 13, metro Nivki

martes, 15 de abril de 2014

Horarios de los oficios de Semana Santa en Kiev
·       Iglesia de San Alejandro:
Dirección: calle Kostelna, 17, metro: Maidan Nezaleznosti.
Jueves Santo: 19h en ucraniano
Viernes Santo: 19h en ucraniano
Vigilia Pascual: 20h en ucraniano
Domingo de Resurrección: 07h y 10h en ucraniano, 11.30h en inglés, 16.30h en ruso y 18h en ucraniano

·       Parroquia de San Nicolás
Dirección: вул. червоноармійська, 77
Jueves Santo: 18.30h en ucraniano
Viernes Santo: 18.30h en ucraniano
Vigilia Pascual: 22.30h en ucraniano

Domingo de Resurrección: 10h. En ucraniano, 11.45h en ruso, 13. 15h en ucraniano y 18.30h en ucraniano

sábado, 29 de marzo de 2014

Lecturas de la misa dominical


 
Primera lectura:  1 Samuel 16,1b.6-7.10-13a
En aquellos días, el Señor dijo a Samuel: «Llena la cuerna de aceite y vete, por encargo mío, a Jesé, el de Belén, porque entre sus hijos me he elegido un rey.» Cuando llegó, vio a Eliab y pensó: «Seguro, el Señor tiene delante a su ungido.» Pero el Señor le dijo: «No te fijes en las apariencias ni en su buena estatura. Lo rechazo. Porque Dios no ve como los hombres, que ven la apariencia; el Señor ve el corazón.»
Jesé hizo pasar a siete hijos suyos ante Samuel; y Samuel le dijo: «Tampoco a éstos los ha elegido el Señor.» Luego preguntó a Jesé: «¿Se acabaron los muchachos?» Jesé respondió: «Queda el pequeño, que precisamente está cuidando las ovejas.» Samuel dijo: «Manda por él, que no nos sentaremos a la mesa mientras no llegue.»
Jesé mandó a por él y lo hizo entrar: era de buen color, de hermosos ojos y buen tipo. Entonces el Señor dijo a Samuel: «Anda, úngelo, porque es éste.» Samuel tomó la cuerna de aceite y lo ungió en medio de sus hermanos. En aquel momento, invadió a David el espíritu del Señor, y estuvo con él en adelante.

Salmo  responsorial 22
El Señor es mi pastor, nada me falta

Segunda lectura:  Efesios 5,8-14
En otro tiempo erais tinieblas, ahora sois luz en el Señor. Caminad como hijos de la luz –toda bondad, justicia y verdad son fruto de la luz–, buscando lo que agrada al Señor, sin tomar parte en las obras estériles de las tinieblas, sino más bien denunciadlas. Pues hasta da vergüenza mencionar las cosas que ellos hacen a escondidas. Pero la luz, denunciándolas, las pone al descubierto, y todo lo descubierto es luz. Por eso dice: «Despierta, tú que duermes, levántate de entre los muertos, y Cristo será tu luz.»


Evangelio: Juan (9,1.6-9.13-17.34-38):
En aquel tiempo, al pasar Jesús vio a un hombre ciego de nacimiento. Y escupió en tierra, hizo barro con la saliva, se lo untó en los ojos al ciego y le dijo: «Ve a lavarte a la piscina de Siloé (que significa Enviado).» Él fue, se lavó, y volvió con vista. Y los vecinos y los que antes solían verlo pedir limosna preguntaban: «¿No es ése el que se sentaba a pedir?»Unos decían: «El mismo.» Otros decían: «No es él, pero se le parece.» Él respondía: «Soy yo.»
Llevaron ante los fariseos al que había sido ciego. Era sábado el día que Jesús hizo barro y le abrió los ojos. También los fariseos le preguntaban cómo había adquirido la vista.
Él les contestó: «Me puso barro en los ojos, me lavé, y veo.» Algunos de los fariseos comentaban: «Este hombre no viene de Dios, porque no guarda el sábado.» Otros replicaban: «¿Cómo puede un pecador hacer semejantes signos?» Y estaban divididos. Y volvieron a preguntarle al ciego: «Y tú, ¿qué dices del que te ha abierto los ojos?»
Él contestó: «Que es un profeta.»Le replicaron: «Empecatado naciste tú de pies a cabeza, ¿y nos vas a dar lecciones a nosotros?»Y lo expulsaron. 
Oyó Jesús que lo habían expulsado, lo encontró y le dijo: «¿Crees tú en el Hijo del hombre?» Él contestó: «¿Y quién es, Señor, para que crea en él?» Jesús le dijo: «Lo estás viendo: el que te está hablando, ése es.» Él dijo: «Creo, Señor.» Y se postró ante él.
Evangelii Gaudium  


197. El corazón de Dios tiene un sitio preferencial para los pobres, tanto que hasta Él mismo «se hizo pobre» (2 Co 8,9). Todo el camino de nuestra redención está signado por los pobres. Esta salvación vino a nosotros a través del«sí» de una humilde muchacha de un pequeño pueblo perdido en la periferia de un gran imperio. El Salvador nació en un pesebre, entre animales, como lo hacían los hijos de los más pobres; fue presentado en el Templo junto con dos pichones, la ofrenda de quienes no podían permitirse pagar un cordero; creció en un hogar de sencillos trabajadores y trabajó con sus manos para ganarse el pan. Cuando comenzó a anunciar el Reino, lo seguían multitudes de desposeídos, y así manifestó lo que Él mismo dijo:«El
Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido. Me ha enviado para anunciar el Evangelio a los pobres» (Lc 4,18). A los que estaban cargados de dolor, agobiados de pobreza, les aseguró que Dios los tenía en el centro de su corazón: «¡Felices vosotros, los pobres, porque el Reino de Dios os pertenece!» (Lc 6,20); con ellos se identificó: «Tuve hambre y me disteis de comer», y enseñó que la misericordia hacia ellos es la llave del cielo.

198. Para la Iglesia la opción por los pobres es una categoría teológica antes que cultural, sociológica, política o filosófica. Dios les otorga «su primera misericordia». Esta preferencia divina tiene consecuencias en la vida de fe de todos los cristianos, llamados a tener «los mismos sentimientos de Jesucristo» (Flp 2,5). Ellos tienen mucho que enseñarnos. Además de participar del sensus fidei, en sus propios dolores conocen al Cristo sufriente. Es necesario que todos nos dejemos evangelizar por ellos. La nueva evangelización es una invitación a reconocer la fuerza salvífica de sus vidas y a ponerlos en el centro del camino de la Iglesia. Estamos llamados a descubrir a Cristo en ellos, a prestarles nuestra voz en sus causas, pero también a ser sus amigos, a escucharlos, a interpretarlos y a recoger la misteriosa sabiduría que Dios quiere comunicarnos a través de ellos.

miércoles, 26 de febrero de 2014

Crónica de los acontecimentos en Kiev durante los días 18 al 21 de febrero

La presencia de Dios acompaña las búsquedas sinceras que personas y grupos realizan para encontrar apoyo y sentido a sus vidas. Él vive entre los ciudadanos promoviendo la solidaridad, la fraternidad, el deseo de bien, de verdad, de justicia. Esa presencia no debe ser fabricada sino descubierta, desvelada (№ 71 de Evangelii Gaudium)

Os agradecemos la preocupación con la que habéis vivido esta semana por las noticias que llegaban de Ucrania y vuestra oración. En muy poco tiempo los acontecimentos nos encaminaban hacia el precipicio de una guerra o de una represión brutal. Pero también, de un día para otro se ha dado el milagro de la fuga del presidente y de la posibilidad de un nuevo nacimento de este país.

Desde finales de enero hasta el martes 18 de febrero, vivimos una tregua en la que se dejó en libertad a los presos de los enfrentamientos de enero. A su vez, la revolución devolvió los edificios oficiales que había tomado. Sólo se quedaron uno, que está en la misma plaza: el antiguo edificio de los sindicatos. Mientras, las concentraciones en Maidán seguían. El ambiente era de paz y de resolución por ir hasta el final para que ya este año hubiera un nuevo gobierno. La oración acompañaba las jornadas en Maidán: por las mañanas y al atardecer. Los domingos es cuando se concentraba más gente y quienes estaban más implicados en Maidán daban sus testimonios, los líderes políticos también apoyaban la causa en sus discursos. Pero antes de todo eso, la primera hora de esa concentración era de oración, era un momento ecuménico vivido con mucho respeto, también por aquellos que no se consideran creyentes. Estas concentraciones a pequeña escala iban teniendo lugar en diferentes puntos del país. En Nezhin se tenían cada tarde.

El martes 18 de febrero se había pedido a la gente concentrarse en la calle del Parlamento para presionar un cambio en la constitución. El presidente, en el 2010,  había hecho una modificación en ella que le otorgaba tanto poder que el parlamento acabó por tener una voz insignificante. Se encontraron con que el parlamento no iba a hablar del tema en el orden del día. Había una gran concentración de policías y dentro del parlamento estaban las fuerzas especiales de seguridad preparadas para una eventual irrupción de los manifestantes. Se había contratado a los “titushki”, delincuentes contratados para armar camorra. A partir de ahí se provocaron altercados entre policías y manifestantes. Otra vez hubo víctimas mortales y muchos heridos. Por la tarde estábamos fuera de casa y cerraron el metro. La ciudad se colapsó y tardamos mucho para poder llegar a casa. Por las calles las ambulancias pasaban con mucha frecuencia. La gente estaba muy asustada.

Por la noche una gran multitud se concentró en Maidán. Estuvieron orando. No podían rendirse aunque estaban muertos de miedo. Durante estos meses el presidente había puesto sus cartas encima de la mesa y la gente interpretaba en ellas que el gobierno era una dictadura solapada. A las dos de la madrugada llegaron las fuerzas del orden y quemaron el edificio de los sindicatos. Se consiguió sacar a muchas personas pero murieron también allí algunos.

Los días siguientes siguió sin funcionar el metro. El miércoles el presidente impuso una ley antiterrorista que controlaba las entradas a la ciudad y la lucha continuó. Hubo muertos y la gente como podía resistía en Maidán. Arrancaban las aceras con picos para lanzar los adoquines a la policía y quemaban ruedas para impedirles avanzar. Ya ese día denunciaron la presencia de francotiradores profesionales. Los que morían habían sido atravesados por balas antiblindados. Las iglesias de San Miguel (del patriarcado de Kiev) y la de San Alejandro (católica) se convirtieron en hospitales improvisados.

El jueves 20 el gobierno había declarado jornada de luto nacional por los muertos de esos días. Pero precisamente fue ese el día más sangriento. Aunque las cifras oficiales dicen que hay 82 fallecidos todos son conscientes de que se superó el centenar. 

Mientras, la gente hacía lo que podía por apoyar la causa: en Nezhin muchos ciudadanos se prestaban para ir a los destacamentos del ejército para impedirles que  salieran hacia Kiev, lo mismo hicieron en el aeropuero militar de la ciudad. También al enterarse dónde el gobierno podía pretendía contratar a “titushkis”, fueron a persuadirlos. Recogieron dinero para ayudar económicamente a la causa y nuestro parroco se encargó de llevarlo a Maidán. Un pueblo del sur del país se acostó en los railes del tren para evitar que un tren cargado de soldados llegara hasta Kiev. Ayer una amiga nos contaba las peripecias que ella y su hermana hicieron para llevar mantas y comida a Maidán. Las dos viven lejos del centro y sin metro no fue fácil llegar hasta allí. Pero en el trayecto, se dieron cuenta de que no sólo ellas iban con fardos pesados, un hormigueo de gente en la ciudad se movía hacia Maidán con ropa y comida caliente para los que luchaban. Nos decía viendo tanta solidaridad: “Yo, en un país así, quiero vivir”

El viernes 20 los ministros de exteriores de Francia, Polonia y Alemania se reunieron toda la noche con el presidente y la oposición en la que acordaron la formación de un gobierno provisional, elecciones en diciembre y un cambio en la constitución. Pero Maidán rechazó la propuesta. No estaban dispuestos a que Yanukovich fuera su presidente hasta diciembre. Seguirían luchando. Por la noche cien policías subieron al escenario para comunicarles que estaban dispuestos a luchar a favor del Maidán. Trajeron a los muertos ya identificados en sus féretros y oraron por ellos toda la noche.

El sábado amanecimos con una noticia inesperada: Yanukovich no estaba en Kiev. Los partidos de la oposición se reunieron inmediatamente en el parlamento, formaron el gobierno de transición, derogaron la constitución, liberaron a Yulia Timoshenko y decretaron que Yanukovich no era presidente. Por la tarde en la tele salió él denunciando que lo que estaban haciendo era un golpe de estado.

A esas mismas horas en San Alejandro se celebraba una misa por los caídos. Estuvimos allí. Aún había colchones con heridos e instrumental médico. Para entrar había que ponerse unos plásticos en los pies. Es una norma que en este país tienen los hospitales. En la homilía uno de los obispos auxiliares pidió que la gente no se deje tentar por el espíritu del rencor y la venganza.

Después bajamos con tres jóvenes a Maidán. Estaba llenísimo de gente. Se seguía rezando por los fallecidos en un ambiente de mucha seriedad y de mucha unidad entre los que allí se habían reunido. Mientras estuvimos trajeron a dos de los fallecidos que habían sido identificados ese día. Mientras llegaban a hombros con el féretro destapado, la gente unánime aclamaba: “Héroe”. Despues los dejaban al lado del escenario y un sacerdote con un grupo de ortodoxos cantaba una liturgia fúnebre. No traían a los fallecidos a la vez, sino uno por uno y cada vez se hacían esas oraciones. Todos los que estaban allí presentes tenían la conciencia de que velaban a quienes habían muerto por ellos.  La gratitud, el dolor y la atmósfera de una plaza entera rezando es indescriptible.

Estando allí también dijeron que el presidente había intentado huír en avión pero se lo habían impedido. Hasta el día de hoy sigue desaparecido. Y también anunciaron que estaba de camino hacia Maidán Yulia Timoshenko. Esperamos hasta verla en el escenario. Notamos que el pueblo había “madurado” o mejor, que había tenido un nuevo nacimiento durante estos tres meses de revolución. Se alegraron de verla, pero no recibió las ovaciones de los difuntos y tampoco se dejaron embelesar por sus palabras. La revolución ha surgido del pueblo. No de los políticos y ellos saben que han sido protagonistas de su propia historia y no se quieren dejar engañar.

David dijo a Goliat que éste lucha con lanza y jabalina mientras que él no tiene más fuerza que la de ir en nombre de Dios. Cuando este pueblo lea este episodio llorará porque lo ha comprendido en su propia carne. La fuerza de su oración ha conseguido más que todas las disquisiciones de los políticos de la Unión Europea, América o Rusia. Ha conseguido derrocar al presidente más allá de sus imposiciones y estratagemas.  

El futuro sigue incierto. Quienes están a favor de Maidán no dejarán que el precio tan caro de su libertad sea en vano. Los detractores o escépticos de la revolución continuan perplejos y sin esperanza para soñar una Ucrania nueva. Hay que seguir rezando mucho.






domingo, 23 de febrero de 2014

Catequesis del miércoles del Papa Francisco
 A través de los Sacramentos de la iniciación cristiana, el Bautismo, la Confirmación y la Eucaristía, el hombre recibe la vida nueva en Cristo. Ahora, todos lo sabemos, esta vida, la llevamos “en vasos de barro” (2 Cor 4,7), estamos todavía sometidos a la tentación, al sufrimiento, a la muerte y, a causa del pecado, podemos incluso perder la nueva vida. Por esto, Jesús, ha querido que la Iglesia continúe su obra de salvación con el Sacramento de la Reconciliación y el de la Unción de los enfermos, que pueden estar unidos bajo el nombre de “Sacramentos de sanación”. Cuando yo voy a confesarme, es para sanarme: sanarme el alma, sanarme el corazón por algo que hice no está bien.
El perdón de nuestros pecados no es algo que podemos darnos nosotros mismos: yo no puedo decir: “Yo me perdono los pecados”; el perdón se pide, se pide a otro, y en la Confesión pedimos perdón a Jesús. El perdón no es fruto de nuestros esfuerzos, sino es un regalo, es don del Espíritu Santo, que nos colma de la abundancia de la misericordia y la gracia que brota incesantemente del corazón abierto del Cristo crucificado y resucitado. En el tiempo, la celebración de este Sacramento ha pasado de una forma pública  a una personal, a aquella forma reservada de la Confesión. Pero esto no debe hacer perder la matriz eclesial, que constituye el contexto vital. En efecto, es la comunidad cristiana el lugar en el cual se hace presente el Espíritu, el cual renueva los corazones en el amor de Dios y hace de todos los hermanos una sola cosa, en Cristo Jesús. No basta pedir perdón al Señor en la propia mente y en el propio corazón, sino que es necesario confesar humilde y confiadamente los propios pecados al ministro de la Iglesia. En la celebración de este Sacramento, el sacerdote no representa solamente a Dios, sino a toda la comunidad, que se reconoce en la fragilidad de cada uno de sus miembros, que escucha conmovida su arrepentimiento, que se reconcilia con Él, que lo alienta
y lo acompaña en el camino de conversión y de maduración humana y cristiana. Alguno puede decir: “Yo me confieso solamente con Dios”. Sí, tú puedes decir a Dios: “Perdóname”, y decirle tus pecados. Pero nuestros pecados son también contra nuestros hermanos, contra la Iglesia y por ello es necesario pedir perdón a la Iglesia y a los hermanos, en la persona del sacerdote. “Pero, padre, ¡me da vergüenza!”. También la vergüenza es buena, es ‘salud’ tener un poco de vergüenza. Nos hace bien, nos hace más humildes. Y el sacerdote recibe con amor y con ternura esta confesión, y en nombre de Dios, perdona.
¿Cuándo ha sido la última vez que te has confesado?¿Dos días, dos semanas, dos años, veinte, cuarenta? Si ha pasado mucho tiempo, ¡no pierdas ni un día más! Ve hacia delante, que el sacerdote será bueno. Está Jesús, allí. Y Jesús es más bueno que los curas, y Jesús te recibe. Te recibe con tanto amor. Sé valiente, y adelante con la Confesión.
Celebrar el Sacramento de la Reconciliación significa estar envueltos en un abrazo afectuoso de la infinita misericordia del Padre. Recordemos la Parábola del hijo que se fue de casa con el dinero de su herencia, despilfarró todo el dinero y luego, cuando ya no tenía nada, decidió regresar a casa, pero no como hijo, sino como siervo. Tanta culpa había en su corazón, y tanta vergüenza. Y la sorpresa fue que cuando comenzó a hablar y a pedir perdón, el Padre no lo dejó hablar: ¡lo abrazó, lo besó e hizo una fiesta!¡Cada vez que nos confesamos, Dios nos abraza, Dios hace fiesta!

Llamado por Ucrania; Con ánimo preocupado sigo todo lo que en estos días está sucediendo en Kiev. Aseguro mi cercanía al pueblo ucranio y rezo por las víctimas de las violencias, por sus familiares y por los heridos. Invito a todas las partes a cesar todo tipo de violencia y a buscar la concordia y la paz en el País.

viernes, 21 de febrero de 2014

Nos unimos al dolor de los familiares de las víctimas de la violencia desatada en Kiev en estos días y pedimos para ellos la fortaleza y el consuelo. Agradecemos el testimonio de quienes con mucho riesgo han atendido a las personas que han resistido en Maidan: a quienes han llevado comida, a los médicos voluntarios, ... Que la esperanza de que el amor es más fuerte que la muerte nos libre de dejarnos robar la esperanza de un futuro mejor para Ucrania 

domingo, 9 de febrero de 2014

Os invitamos

El miércoles 12 tendremos un momento de oración en torno a nuestra madre en casa de Amelie. 
Dirección: Bogdana Khmelnitskogo, 32-apt 25, cerca del metro Zoloti Borota

Hora: 19h
Lecturas de la misa dominical
Primera Lectura: Isaías 58,7-10
Así dice el Señor: "Parte tu pan con el hambriento, hospeda a los pobres sin techo, viste al que ves desnudo, y no te cierres a tu propia carne. Entonces romperá tu luz como la aurora, en seguida te brotará la carne sana; te abrirá camino la justicia, detrás irá la gloria del Señor. Entonces clamarás al Señor, y te responderá; gritarás, y te dirá: "Aquí estoy." Cuando destierres de ti la opresión, el gesto amenazador y la maledicencia, cuando partas tu pan con el hambriento y sacies el estómago del indigente, brillará tu luz en las tinieblas, tu oscuridad se volverá mediodía."
Salmo Responsorial: 111
"El justo brilla en las tinieblas como una luz."
Segunda Lectura: I Corintios 2,1-5
Yo, hermanos, cuando vine a vosotros a anunciaros el misterio de Dios, no lo hice con sublime elocuencia o sabiduría, pues nunca entre vosotros me precié de saber cosa alguna, sino a Jesucristo, y éste crucificado. Me presenté a vosotros débil y temblando de miedo; mi palabra y mi predicación no fue con persuasiva sabiduría humana, sino en la manifestación y el poder del Espíritu, para que vuestra fe no se apoye en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios.

Evangelio: Mateo 5,13-16
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "Vosotros sois la sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve sosa, ¿con qué la salarán? No sirve más que para tirarla fuera y que la pise la gente. Vosotros sois la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad puesta en lo alto de un monte. Tampoco se enciende una lámpara para meterla debajo del celemín, sino para ponerla en el candelero y que alumbre a todos los de casa. Alumbre así vuestra luz a los hombres, para que vean vuestras buenas obras y den gloria a vuestro Padre que está en el cielo."